Es en este año cuando la sede de la institución se abre por vez primera a albergar actividades de todo tipo: charlas, talleres, meditaciones de Luna Llena y más. Algunas de ellas son organizadas desde Fundación Arsayian y otras acogidas por propuesta externa. Además, se inaugura la posibilidad de ofrecer diversos tipos de actividades terapéuticas. Esto senta un precedente y la sede se convierte no sólo en el centro neurálgico de los caminos de Matías, sino en parte activa del mensaje del Plan del Ater Tumti.